La importancia de la Energía

Cada vez consumimos más energía: al ritmo actual sólo tardaremos 35 años en duplicar el consumo mundial de energía y menos de 55 años en triplicarlo.

Los sectores de la vivienda y el transporte han sido los que más han incrementado su consumo en los últimos años. El consumo de energía por las familias españolas es ya un 30% del consumo total de energía del país, repartiéndose casi a partes iguales entre el coche privado y la vivienda.

La Conferencia de Kyoto de 1997 estableció que los países firmantes (entre ellos el nuestro) fomentarían el uso racional de la energía y desarrollaría racionalmente la utilización de las fuentes energéticas renovables para limitar el consumo de combustibles fósiles y reducir las emisiones contaminantes en la atmósfera, que provocan el peligroso efecto invernadero.

El uso de energía forma parte de nuestro estilo de vida, de nuestro comportamiento y de nuestro quehacer diario, por ello, todos los consumidores hemos de comprometernos a ahorrar energía, no sólo para mejorar la calidad del medioambiente, sino también porque la factura energética es una más entre las que contribuyen a los gastos familiares: La energía es un bien cada vez más importante pero costoso.

A medida que una sociedad es más desarrollada, consume más energía, pero no siempre lo hace de forma eficiente. Son las administraciones quienes han de alentar a los consumidores para una utilización más racional de aquella y al mismo tiempo impulsar las procedentes de fuentes renovables.